Es una serie basada en los libros de L. J Smith y creada por Kevin Williamson. Estrenada en 2009, cuenta la historia de Elena, una chica popular y amable que pierde a sus padres en un accidente y debe luchar para salir de la depresión y ayudar a su hermano a lidiar con sus problemas de drogas. Su tía llega a vivir con ellos y Elena regresa a la escuela después de un rato de ausencia por el luto. Conoce a Stefan Salvatore un misterioso y atractivo chico que la cautiva, al mismo tiempo que en Mistic Falls (lugar donde se desarrolla la trama) empiezan a ocurrir extraños asesinatos y desapariciones y las autoridades saben exactamente a qué se debe, los vampiros han regresado a la ciudad.
Podría decirse que es un refrito de Crepúsculo, pero no, éstos libros salieron antes (en 1991) y vaya que supieron aprovechar el furor de Crepúsculo para sacar la serie, la cual ha tenido mucho éxito, además de que las series con temas sobrenaturales (Teen Wolf, Split, etc) gozan de popularidad actualmente. Los vampiros y otros monstruos están de moda. No he leído los libros, pero si vi la primer temporada y la historia es diferente a Crepúsculo, aún así los fans de ambas sagas discuten y discuten (típico).
La serie es muy buena y además cuenta con un reparto juvenil fresco y atractivo, Ian Somerhalder se ve estupendo como el malvado Damon (¡papacito!) y las actuaciones son creíbles. Es un buen trabajo y si tienen oportunidad de verla, no se arrepentirán.
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